Seguimiento global de las conductas de consumo sostenible

A pesar del lento ritmo de cambio en los comportamientos en los supermercados, respecto de las tendencias de consumo sostenible, señala un reporte reciente de la consultora global Mintel que se está produciendo una una especie de movilización hacia productos más orgánicos y dietas basadas en alimentos de origen vegetal.

Al menos, señala el informe Perspectiva Global de Sostenibilidad de Mintel, el 58% de los consumidores compra ahora productos más orgánicos. Acerca de otros ámbitos en que se manifiesta la sostenibilidad desde la perspectiva de los consumidores, dice el reporte que un 34% declara usar energía renovable en el hogar.

Mientras tanto, los niveles de penetración de los vehículos eléctricos se cifran en un 8%, la energía solar doméstica en un 19% y las bombas de calor en un 18%, tendencias que según el estudio global son todos fuertes y crecientes.

Se trata, según la empresa, de un estudio que rastrea, en las economías más grandes del mundo, las prioridades ambientales y sociales, las tendencias de compra y el compromiso

Consumos sostenibles más populares

La relevancia del informe radica, según Mintel, en que proporciona a las empresas información e inspiración sobre la mejor manera de posicionar y priorizar productos y servicios en un mundo cada día más consciente de la sostenibilidad. Y entrega, como parte de su contenido, una suerte de ranking de los comportamientos sostenibles más populares en el último año, 2024.

Es así que, un 62% de los alrededor de 10.000 encuestados dijo haber preferido envases reciclados, mientras el 43% señaló comprar menos ropa nueva. En tanto, un 33% dijo haber reducido la energía que usa para cocinar y un porcentaje similar compró algún producto en formato de recarga.

El 22% dijo que contrató o arrendó un producto en lugar de comprarlo, por ejemplo una herramienta para una tarea en el hogar. Y el 18% se cambió a un proveedor de electricidad o de gas que utiliza únicamente energía renovable 18%.

Igual proporción compró un producto tecnológico usado o reutilizado en lugar de uno nuevo, mientras que un 13% compró productos certificados como menos dañinos para el medio ambiente. Finalmente, el 10% adquirió productos certificados como de salarios justos para los trabajadores.